El Club de Judo Costa Teguise Lanzarote (CJCT) está de enhorabuena. Los técnicos y judocas del club han conseguido seguir mejorando sus titulaciones en Gran Canaria donde, la pasada semana, tuvo lugar el IV Congreso de la Disciplina de Defensa Personal donde los teguiseños obtenían nuevos títulos y la totalidad de los objetivos planteados.
Al mismo tiempo, el club ha recibido las recompensas de la disciplina de Judo en base a sus currículos y resultados, dependiendo del historial de cada deportista. Alejandro Ramírez Doblado ha logrado el 3º Dan y MEN (Maestro Entrenador Nacional) en la disciplina de Defensa Personal.
Además, Ramírez recibía otra noticia de la Real Federación Española de Judo sobre el tatami, entrenando a la notable cantera que ha formado. Recibe ahora la recompensa por su labor con el 6º Dan (Cinturón Blanco/Rojo) en Judo, disciplina en la cual también es MEN desde hace muchos años.
Otros compañeros galardonados han sido Álvaro Cano (2º Dan), Julián Lozano (5º Dan) y Jorge Rey (6º Dan).
El responsable de la entidad teguiseña, Antonio Ramírez, felicita “a los judocas y técnicos del Club de Judo Costa Teguise Lanzarote, mejorando sus currículos y, al mismo tiempo, mejorando el servicio que ofrece nuestro club y el judo de Lanzarote y Canarias, metiendo al CJCT en el top-ten nacional”.
Por su parte, Alejandro Ramírez explicaba que “conseguir el sexto dan, el cinturón blanco rojo, significa mucho, significa tiempo. No hay otra palabra más que tiempo. Desde que me acompañó mi abuelo en el año 94, 93 a la Acrópolis. En aquel entonces había un maestro, aprendíamos por medio del juego, aprendizaje lúdico y a pasarlo bien, hasta que con 15 o 16 años obtienes el primer dan, el primer cinturón negro y empiezas a conocer un poco más otros sectores como es el de la competición que también tiene sus valores. El mundo de la competición empiezo a conocerlo con 14 y ya con 17 años de manera más seria. En esa etapa de competición conoces infinidad de deportistas y entrenadores. He estado vinculado al mundo de la competición hasta los 33 años con buenos resultados regionales, nacionales e internacionales y, como no, la Liga Nacional, que siempre nos ha marcado mucho. Llevo ya 24 o 25 años, con muchos compañeros de la selección canaria, del equipo nacional, hasta llegar a la máxima división nacional. Hoy por hoy puedo presumir de que mis alumnos defienden esta categoría de Liga Nacional. Esto como atleta y, como docente, formándome, académica y federativamente. Con ya creo que 3 o 4 generaciones en mis manos, hasta la edad adulta donde adquieres siempre un aprendizaje y empleas una enseñanza, es un feedback y, muchos de esos chicos y chicas obtienen resultados deportivos y hasta sus formaciones como monitores, obtienen sus cinturones negros. Otros se quedan en el camino pero siempre se les va a quedar esa etapa del deporte, en este caso del judo en sí mismo, para ayudarles en su labranza profesional o en otras disciplinas deportivas. No quiero olvidar la infinidad de padres y madres con los que me he relacionado. Siempre ha sido un estilo de vida. El cinturón blanco rojo significa volver a empezar otro ciclo. Y paradojas de la vida, empieza uno siendo cinturón blanco y termina siendo cinturón blanco, lo que quiere decir que nunca dejas de aprender. Hay un dicho que dice que cuando eres joven enseñas con tu cuerpo, con tu movilidad, y cuando tienes cierta edad enseñas con tu sabiduría. Yo todavía me siento en la primera etapa, en la de joven. Como decía arranqué en esos años, pasamos por la Ciudad Deportiva, luego pasamos al Blas y, de ahí, al Colegio de Costa Teguise y después al Cuartel Marqués de Herrera y conseguimos tener unos ahorros para tener nuestras propias instalaciones, actualmente las de Arados, el Centro de Tecnificación. Pero, sin duda, lo más importante es que la familia siempre ha permanecido con el vínculo del judo en Costa Teguise. Es un volver a empezar, otro ciclo. Es un gran honor recibir este galardón”.
El reconocimiento oficial tendrá lugar en la Gala del 75º Aniversario RFEJYDA, el próximo 30 de noviembre, en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria.