El PSOE ha denunciado la situación de abandono en que se encuentran parte de las instalaciones de la ciudad deportiva de Arrecife, dependiente del Cabildo de Lanzarote. En concreto, se han referido a las canchas deportivas anexas a la Ciudad Deportiva que “presentan una imagen deteriorada y descuidada que no es propia de un espacio deportivo”.
“No es de recibo que un complejo deportivo para el uso y disfrute de todos los lanzaroteños se encuentre en un estado deplorable por falta de mantenimiento”, ha señalado la consejera del Grupo Socialista, Celeste Callero.
Según la consejera socialista, la dejadez del equipo de gobierno formado por Coalición Canaria y Partido Popular ha convertido las instalaciones de la ciudad deportiva en un recinto deteriorado, donde no se realiza ningún tipo de reparación para mantener adecuadamente el complejo y alcanzar los niveles de modernización que merece Lanzarote en unas instalaciones insulares.
“Es una vergüenza que Oswaldo Betancort y su equipo de gobierno mantengan esas instalaciones abandonadas a su suerte”, ha indicado la consejera del PSOE, quien ha recalcado que el lamentable estado del complejo no invita a su uso. “No podemos permitir que las instalaciones, sigan deteriorándose por la desidia del equipo de gobierno del Cabildo de Lanzarote”, ha señalado Callero, quien ha exigido a Oswaldo Betancort para que tome las medidas necesarias para mantener las instalaciones dignamente.
Asimismo, Callero ha señalado que, por otro lado, “es lamentable que el campo de fútbol y la pista de atletismo hayan estado inutilizadas desde finales de mayo por la celebración de eventos musicales”. En su opinión, la falta de organización en la preparación de los eventos y el no desmontaje de los mismos ha impedido que se puedan utilizar con normalidad las instalaciones durante todo el verano, ya que las obras no comenzarán hasta septiembre.
“Oswaldo Betancort olvida a los cientos de jóvenes que utilizan el recinto para la práctica del deporte base y prioriza su ocupación por parte de entidades de carácter privado a las que no se les exige generar el mínimo impacto o perjuicio a los usuarios de la Ciudad Deportiva”, señala Callero. “Las infraestructuras están impidiendo el verdadero uso de las instalaciones, la práctica deportiva, que no debe verse bloqueada por falta de agilidad y operatividad en la organización de eventos”, añade Callero.