El Cabildo de Lanzarote, a través del Área de Deportes, que dirige Juan Monzón, ha presentado este miércoles, 3 de abril, un estudio sobre la huella de carbono realizado por la Federación de Automovilismo de Las Palmas.
A dicho acto acudieron, además de Monzón, el presidente de la Federación de Automovilismo de Las Palmas, Miguel Ángel Domínguez; el viceconsejero de Deportes del Gobierno de Canarias, Ángel Sabroso, y el director general de Transición Ecológica y Lucha contra el Cambio Climático del Gobierno de Canarias, Ángel Montañés.
El estudio ha calculado la huella de carbono de todas las competiciones de automovilismo en la provincia de Las Palmas durante el año 2021, que alcanza las 154,33 toneladas de CO2. Los datos recopilados para el análisis fueron proporcionados por el Ministerio de Transición Ecológica.
El director general de Transición Ecológica y Lucha contra el Cambio Climático del Gobierno de Canarias, Ángel Montañés, afirmó que “este estudio es pionero en materia deportiva y va a ser un punto importante dentro del deporte en nuestro archipiélago”. “Desde la Consejería valoramos que se apueste por obtener datos que permitan mitigar la huella de carbono que genera esta actividad”.
Durante su intervención, el presidente de la Federación de Automovilismo de Las Palmas, Miguel Ángel Dominguez, señaló que “buscamos demostrar que el deporte del motor es compatible con el medio ambiente”.
Por su parte, el viceconsejero de Deportes, Ángel Sabroso, aseguró “que hoy se hace una demostración evidente del compromiso que tienen instituciones como el Cabildo de Lanzarote y la Consejería de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias, o como el deporte canario en general, con la protección del bien más preciado que tenemos en nuestras islas, que es su territorio y su medio ambiente”.
Asimismo, el consejero de Deportes del Cabildo, Juan Monzón, recalca que “esta es una prueba más de que este grupo de gobierno viene a hablar en claves positivas y de gestión, y a trabajar de la mano de la Federación y de las administraciones competentes para que el mundo del motor en Lanzarote no desaparezca”. “Esta es una obligación y un compromiso real del Cabildo insular”.
El estudio cuenta con tres alcances: en primer lugar, las emisiones directas de gases de efecto invernadero, es decir, las que podemos controlar, como el gasto de combustible; después las indirectas como el consumo de electricidad; y por último, las denominadas como actividades secundarias, en donde entran los desplazamientos de los aficionados o la producción del merchandising.
Se realiza una recopilación de toda la información necesaria, siendo los datos más importantes el número de coches que han participado y el número de kilómetros que se han recorrido. Aunque también se tuvo en cuenta el consumo de litro de combustible por kilómetro recorrido, para conocer el total de combustible consumido, siendo este el índice de actividad.
Una vez hallado el índice de actividad, se obtuvo el cálculo de la huella de carbono, la cual asciende a un total de 154,33 toneladas de CO2. De esa cuantía, se emiten 15 toneladas de CO2 en la isla de Lanzarote. A modo de contrarrestar este impacto se han plantado 900 árboles en Gran Canaria, dando por compensada la huella de carbono.
De todas formas, también se trabaja en más medidas de mitigación como campañas de concienciación para los aficionados, puntos de reciclado en todas las competencias para una correcta gestión de los residuos, y en la reducción del consumo de papel y plásticos.