La diputada del Grupo Parlamentario Nacionalista (CCa), Cristina Calero, ha preguntado en el Pleno del Parlamento de Canarias por las acciones de mejora que se van a llevar a cabo en los centros de educación especial y en las aulas enclave en materia de infraestructura.
En la pregunta dirigida al consejero de Educación, la diputada nacionalista ha recordado que “la diversidad es un componente implícito en la sociedad y el aula, no es una excepción”
Según Cristina Calero, todas las personas somos diferentes, tenemos necesidades distintas y ritmos de aprendizaje diversos “por lo que las políticas educativas tienen que ser flexibles y adaptarse a esas necesidades propias”. Asimismo, Calero destacó que el mayor ejemplo de esta atención a la diversidad “son las aulas enclave y los centros especiales de educación, que acompañan a quienes más lo necesitan”.
La diputada de Coalición Canaria señaló la importancia de atender la diversidad “poniendo al alumnado, a sus necesidades y particularidades en el centro de las políticas educativas”.
Para alcanzar este objetivo, Calero recordó la necesidad de contar con profesionales que puedan ejercer su desempeño en condiciones adecuadas para atender al alumnado que más lo necesita, alumnado con necesidades educativas especiales. También con recursos que eliminen las barreras o promuevan su autonomía personal y aprendizaje educativo y espacios sin barreras de ningún tipo, tanto para profesionales, especialistas, profesorado y alumnado.
En referencia a este último aspecto, la diputada de Lanzarote ha preguntado por las acciones previstas en materia de infraestructuras para el alumnado con necesidades educativas especiales. En este sentido, se ha referido al centro de educación especial, Virgen de los Volcanes, el único centro de educación especial de Lanzarote ubicado en Tahíche. “Un Centro que cuenta con una impecable trayectoria y arraigo pero que necesita ampliación”, apuntó Calero.
Calero detalló que este Centro “acoge al doble de alumnado de la capacidad para la que fue diseñado inicialmente, siguen llegando peticiones de nuevas matrículas y ya no queda más espacio, ni para que los profesionales puedan desarrollar su labor de forma adecuada, ni para el alumnado que requiere es esos espacios para su aprendizaje y su desarrollo personal”.
Una circunstancia, destacó Cristina Calero, que necesita respuesta por parte de la consejería “porque el alumnado de Lanzarote que más lo necesita no puede esperar más”.