El pianista, compositor y arreglista cubano Chucho Valdés ofreció un concierto a la altura de lo que representa su leyenda y, seguro, de lo que esperaban los cientos de seguidores que abarrotaron el Auditorio Jameos del Agua el pasado sábado.
El icono de la música latina brindó un espectáculo repleto de buena música y de momentos de nostalgia en lo que supuso el estreno de la gira mundial que está realizando en homenaje a Irakere 50, la mítica banda cubana que marcó un antes y un después en el jazz latino por su magistral fusión de la música ritual afrocubana con la música popular cubana, el jazz, el rock y la música clásica.
El cubano se encontró con un Auditorio con ganas de disfrutar, y que fue ganando temperatura conforme se sucedían los éxitos de un artista que se ha convertido en leyenda de la música gracias a noches como la vivida el pasado sábado. Valdés se metió al público en el bolsillo con su sencillez, sus conocimientos musicales y, sobre todo, sus ritmos, que hicieron mover el esqueleto a una grada que le puso en serios aprietos para abandonar el escenarios… después de dos horas de brillante actuación.
Una gran parte del público cerró una noche inolvidable disfrutando del habitual cóctel que ofrecen la posibilidad de reservar los Centros Turísticos tras un evento.
La actuación del ganador de 7 premios Grammy, 6 premios Grammy Latino y el galardón de la Academia Latina de la Grabación con el Premio a la Excelencia Musical en el Auditorio Jameos del Agua está enmarcada en una colaboración de los Centros Turísticos y la organización del Festival Canarias Jazz & Más Músicas Creativas.