El consejero del Cabildo Insular de Lanzarote por Unidos por Yaiza, Óscar Noda, lamenta profundamente la actitud del presidente cabildicio, Oswaldo Betancort, quien, disimulando bajo la clámide interesada de Coalición Canaria, ha vuelto a demostrar que solo piensa en los intereses de su formación política y en que nadie de las islas capitalinas, que lo teledirigen a diario, no le haga temblar la silla que tanto le ha costado conseguir.

Ante la negativa rotunda e injustificada del gobierno de Betancort a desarrollar, en firme y mediante acuerdo plenario porque ya se conoce el valor de sus palabras, las gestiones necesarias con el Gobierno de Canarias para impedir que los grados relacionados con los diferentes sectores del sector primario, que se imparten en el ÍES Teguise y en el ÍES Zonzamas, desaparezcan de estos centros educativos, solo se puede pensar en que para el presidente de lanzaroteños y gracioseros importa mucho más Coalición Canaria y su pacto con el PP, a pesar del anuncio de que se mantendrán esos ciclos que inicialmente no aparecían en el listado provisional de la oferta educativa lanzaroteña.

Noda se muestra contundente y convencido, “vamos a seguir insistiendo en la recuperación e implementación de estos estudios por la vital importancia que tienen, tanto para el sector hotelero como para el sector primario. A menudo el señor Betancort se llena la boca con actos en torno al campo de Lanzarote, a La Geria y los intereses para sus ciudadanos cuando la triste verdad, y se demuestra una vez más, es que en nuestros agricultores, en nuestros jóvenes, no piensa. “Si no se hubiese protestado, nada se hubiese hecho, estamos gobernados por gestores a los que tenemos que empujar a tomar decisiones y acciones”, defiende el consejero Óscar Noda.

Noda también critica que si no es por la voz de alarma de los sindicatos de profesores y la presentación de esta moción que él mismo ha definido hoy y que se presentó a principios de junio, nada se hubiese hecho, dando por perdido estos ciclos formativos.

Además, Noda, sospecha que esta acción es una estratagema de CC y PP de ponerse la medalla de salvadores en la isla, ante un ataque del Gobierno regional que no se había producido con anterioridad, ya que se consideraba que esos ciclos de vitivinicultura y de formación agraria y de jardinería estaban consolidados como derechos educativos de los conejeros.

“Dentro de unos lustros”, prosigue Óscar Noda, “cuando en Lanzarote nos lamentemos, ya sin solución, por la “desertización” del campo, y nos quejemos amargamente del abandono generacional en el sector primario o de las escasas salidas para nuestros jóvenes, nos acordaremos de presidentes como el que dirige actualmente el Cabildo de Lanzarote que, en vez de mirar por el bien de sus ciudadanos, mira solo por sus jefes de las islas capitalinas y por las patas del sillón presidencial.

“En esta ocasión nos hemos dado cuenta de este recorte de derechos, pero, la inacción y el pasotismo hacia su isla y su ciudadanía de Oswaldo Betancort nos terminará pasando factura dentro de un tiempo. Al tiempo”, sentencia Noda.