El responsable del área de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Manuel Miranda, explicó en una visita al pueblo de La Aldea de San Nicolás, en Gran Canaria, que “desde nuestro departamento estudiamos el desarrollo del planeamiento en todo el Archipiélago, pero atendemos de forma especial la ordenación del territorio en los núcleos poblacionales de menos de 10.000 habitantes”.
Así lo explicó el consejero, acompañado por la directora de la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural, Montserrat Ortega, en el marco de una visita institucional al municipio grancanario, en la que estuvo presente su alcalde, Víctor Juan Hernández, y el primer teniente de alcalde, Pedro Suárez.
El consejero afirmó que el Gobierno de Canarias, entre otros trabajos relacionados con el reto demográfico, está analizando cómo contribuir a que los municipios de menos de 10.000 habitantes, que tienen problemáticas similares, logren actualizar sus planeamientos y herramientas que les permitan compartir las mismas oportunidades que tienen los municipios de mayor población.
Los responsables municipales han manifestado al consejero su intención de acogerse a la subvención impulsada por el Gobierno de Canarias para mejorar el planeamiento municipal. Se trata de una línea que suma 2,3 millones de euros en total y de la que pueden ser beneficiarios aquellos ayuntamientos que tengan que acometer actualizaciones en su planeamiento. En concreto, la intención de La Aldea es adaptar su Plan General a la Ley del Suelo y al Plan Insular de Ordenación Territorial.
Además plantearon a Manuel Miranda la posibilidad de aumentar la colaboración para impulsar proyectos de regeneración de espacios que han sido utilizados como vertederos, trabajos en los que la Agencia tiene experiencia en otros proyectos similares en diferentes zonas del Archipiélago.
La directora de la ACPMN puso sobre la mesa el procedimiento para afrontar el abandono de algunos invernaderos y la gestión de sus residuos. Monserrat Ortega informó de que “hay varios expedientes abiertos en el municipio por esta razón”, y ambas administraciones han acordado impulsar la retirada y mantenimiento de dichos instalaciones.
Víctor Juan Hernández trasladó “la necesidad de actualizar las plantas de depuración que existen en el municipio, así como la mejora de las redes de abastecimiento”, proyectos que serán tratados junto al Consejo Insular de Aguas.