Los concejales de VOX en el Ayuntamiento de Arrecife, Eugenio Hernández Cabrera y Jorge Enrique Barrios Rodríguez, están convencidos de que el actual Gobierno de Partido Popular (PP) y Coalición Canaria (CC) está perdiendo un hermoso tiempo para afrontar asuntos teóricamente fáciles de resolver como puede ser el dar algo de empaque y de brillo a las zonas más abandonadas de la capital lanzaroteña. De hecho, ambos consideran que el alcalde, Yonathan de León, y su grupo de gobierno están más pendientes de sus enfrentamientos internos y externos y de sacar adelante todo tipo de eventos festivos que de cumplir con cuestiones básicas para las que los ciudadanos aportan cada año sus impuestos, que no son pocos teniendo en cuenta lo que se recauda en el municipio. De este modo, los dos concejales creen necesario explicar que están viendo con una gran preocupación el estado de absoluto deterioro
en el que se encuentran centenares de viviendas en la ciudad, la que dicen que es la tercera capital de Canarias.
“El aspecto que está tomando Arrecife, en particular el centro, con cantidad de viviendas alineadas en la misma calle totalmente abandonadas, tapiadas y hasta quemadas, muchas de ellas también afectadas por el fenómeno de la ocupación, es absolutamente lamentable. Hablamos de zonas como la calle Coronel Bens, la calle Cienfuegos o la calle La Inés, por poner algunos ejemplos”, subraya el portavoz municipal, Eugenio Hernández. “Aunque tenemos una ordenanza municipal de fecha de 9 de febrero de 2007, que fija los parámetros que regulan la estética del centro de Arrecife estableciendo los valores arquitectónicos y urbanos del entorno, no se está haciendo absolutamente nada por parte de nuestros gobernantes para garantizar y exigir su cumplimiento.
El Centro Histórico de Arrecife es un espacio urbano de calidad y no se están dando cuenta de lo importante que es, tanto para los residentes como para las personas que nos visitan. Da la sensación de
que les da igual si se cae a cachos”, argumenta indignado. Para Hernández, es importante exigir al grupo de gobierno municipal que no se queden también en este asunto cruzados de brazos y que se pongan inmediatamente a trabajar en la conservación y el mantenimiento de los edificios emblemáticos y de los que forman parte del conjunto de viviendas tradicionales de Lanzarote.
“El Ayuntamiento debe tener mecanismos para que este tipo de edificaciones tomen el aspecto que necesitan y no afeen ni deterioren el entorno cercano de la ciudad. Los vecinos afectados tienen que tener también el aliento y la ayuda de la administración, que les debe exigir pero que debe colaborar con ellos en arreglar todo lo que está mal y afecta al conjunto de la ciudadanía. La percepción y la opinión de los residentes y de los visitantes sobre el grado de conservación de nuestras calles es pésima. Lo de que Arrecife es el patito feo de Lanzarote está desde hace mucho tiempo en boca de todo el mundo y no puede ser. Arrecife tiene un potencial enorme que ni los actuales gobernantes ni la mayoría de los anteriores ha sabido ver”, denuncia el portavoz de VOX visiblemente molesto.
El Grupo de VOX en la capital lanzaroteña está estudiando así elevar al Pleno del Ayuntamiento una propuesta para que le den de forma urgente al centro de Arrecife un cambio de estética que se enmarque dentro del Plan General de Ordenación. “Lo que queremos es colaborar con una gente que se presentó a las elecciones prometiendo que iban a dar un giro radical a Arrecife, que la iban a transformar, y lo único que estamos viendo hasta el momento son parches, sin que exista un gran plan de acción, un proyecto ambicioso que ponga a la ciudad en el verdadero lugar que le corresponde”, insiste el portavoz municipal.
“Nos gustaría que se pusiera un punto y aparte en los aspectos morfológicos y estéticos de las construcciones y edificaciones, en las nuevas edificaciones, que se trabaje con agilidad y rapidez en esos cambios y que, siempre respetando la regulación vigente, seamos capaces incluso de sorprender a los descreídos ciudadanos de un municipio en el que cada vez, por desgracia, acude menos gente a votar por la falta de fe en sus representantes públicos. Queremos proyectos ambiciosos pero también que se cambien las fachadas, que se pinten puertas y ventanas, que se quite de una vez el horroroso cableado que hay por todas partes y se soterre, que se atienda lo que con tanto desinterés y desgana se ha desatendido”, concluye Eugenio Hernández.